Tus ojos son dos luceros
con los que yo ilumino mi noche
con los que yo te digo te quiero
y tu me das un reproche.
Con mi pasión quisiera envolverte
con mi corazón estrangularte
prefiero morir a no verte
y matar para encontrarte.
Como quisiera tener tu cuerpo
sumergido en la miel.
Y decirte en cada momento
que no te quiero perder.
jueves, 9 de junio de 2011
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